La nueva titular de la Conselleria de Justicia e Interior, Elisa Núñez, ya anunció en noviembre del año pasado que pretendía estudiar la introducción de cambios en el reglamento que regula los bous al carrer. Según avanzó entonces, estas modificaciones deberían servir para mejorar tanto la seguridad de los festejos como las condiciones de las reses respecto al calor. El pasado 22 de febrero, representantes del Consell Valencià de Col.legis Veterinaris (CVCV) se reunieron con responsables de este departamento para estudiar posibles cambios en esta dirección y para concretar cuál sería el papel del veterinario en estos festejos.
El anuncio de la reforma se produjo antes de acabar el año, en el transcurso de la celebración de la Comisión de Festejos Taurinos Tradicionales y tras hacer balance de los celebrados en 2023. A comienzos de año se supo de la intención de la consellera Núñez de abordar de manera separada con los diferentes colectivos miembros de este foro consultivo sus impresiones acerca de los cambios en el reglamento.
La cita del 22 de febrero estuvo presidida por el director general de Interior, Arturo Alepuz -quien estuvo acompañado del responsable del Servicio de Espectáculos Públicos, Fernando Castellano- pero en ella también participó Manuel Lázaro, jefe de Servicio de Producción y Sanidad Animal. Por parte del CVCV, acudió Javier Mazón (del ICOVV) y Herminia González-Albo (vicepresidenta del COVCS). A la cita también se incitó a un representante de la Asociación de Ganaderos de Bous al Carrer de la Comunitat Valenciana.
Decreto 58/2023
Justicia e Interior tiene las competencias para regular estos festejos pero estas responsabilidades -en materia de sanidad animal- las comparte con el departamento agrario. La concurrencia de la conselleria de Aguirre es, además, especialmente relevante porque debe aclarar algunos extremos clave sobre la aplicación del Decreto 58/2023, de 14 de abril, de ordenación del sector ganadero, por el cual se regulan los procedimientos de registro, identificación y movimiento de los animales de las explotaciones ganadera.
Este decreto regula, entre otras cuestiones, las condiciones de bienestar de los corrales donde se alojan los bovinos que participan en estos festejos. Exigencias que van en la misma dirección de lo reclamado por la consellera Núñez pero que el decreto no deja claro quién se encargará de supervisar que se cumplen.
Además, este decreto incluye una disposición transitoria -a la que en su momento se opuso el CVCV- que permite que la guía para el retorno de los animales tras el festejo pueda ser expedida por el veterinario oficial “siempre y cuando no se vaya a realizar en un plazo superior a 48 horas desde la salida de origen”. Pero este excepcional modo de proceder -reclamado por las peñas taurinas- se permitirá hasta el 18 de abril y queda por confirmar si esa fecha será o no ampliada. El hecho es que el referido decreto ya establece que los certificados sanitarios de traslado de reses de lidia a espectáculos taurinos pueden ser realizados por los servicios veterinarios oficiales o por los veterinarios habilitados.