La falta de dosis, agravada por las restricciones a la vacuna de AstraZeneca, así como un cambio de última hora en la Estrategia de Vacunación Covid-19 del Ministerio de Sanidad, forzó a retrasar en primera instancia la vacunación a los veterinarios valencianos. Así se quedó el día 15 de febrero tras un encuentro con casi todos los colectivos sanitarios salvo cuatro (incluidos los veterinarios).