Este mes el Parlamento Europeo votará una moción para incluir a todos los antimicrobianos críticos de máxima prioridad de la Organización Mundial de la Salud (colistina, macrólidos, fluoroquinolonas de tercera y cuarta generación, así como cefalosporinas) en una lista reservada exclusivamente para humanos, a lo que se han opuesto numerosas entidades veterinarias (entre ellas Colvema, a través de un escrito remitido por la FVE), por considerar que supondría un riesgo para la salud animal.
