Tras los recientes casos de visones que han sido infectados por el SARS-CoV2, la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE) ha decidido publicar un borrador de orientación sobre cómo reducir el riesgo de propagación de las personas a los animales domésticos. La OIE alienta a los países a promover estas estrategias de reducción de riesgos y a monitorear especies animales susceptibles a la infección por Covid-19.
Así, explica que la Covid-19, causada por la infección por coronavirus, es una enfermedad humana que ha surgido de un animal y se convirtió en una pandemia a través de la transmisión generalizada de persona a persona. Por tanto, la naturaleza de este nuevo virus zoonósico, su amplia distribución y la susceptibilidad de algunas especies animales a la infección ha provocado infecciones animales como resultado del contacto entre personas infectadas y animales susceptibles, y plantea la preocupación de que algunas especies animales puedan convertirse en reservorios del SARS-CoV-2.
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