cvcvnot5.5ene

El CVCV pide que la seguridad alimentaria sea considerada en el diseño de los menús saludables 

El Consell Valencià de Col.legis Veterinaris (CVCV) ha presentado a la Conselleria de Sanitat Universal i Salud Pública alegaciones al proyecto de decreto por el que se fijan los criterios para garantizar menús saludables en servicios de restauración colectiva. La norma ahora promovida pretende fomentar una alimentación saludable y sostenible en todos los servicios o suministros de menús: tanto de atención domiciliaria, como en comedores o establecimientos de restauración colectiva en centros educativos no universitarios, centros universitarios, centros sanitarios y de servicios sociales (con independencia de su titularidad), residencias juveniles, albergues y campamentos de titularidad pública. El CVCV rechaza en sus aportaciones el planteamiento contenido en este borrador, que establece que los menús deben ser únicamente diseñados por profesionales con titulaciones con competencias en salud pública y exige ampliar tal perfil a quienes tengan competencias en materia de seguridad alimentaria.

De igual forma, el órgano colegial defiende que se incluya que los menús, además de cumplir con que sean saludables, variados y equilibrados -como se dice- “han de ser seguros”. En parecido sentido, se remarca que determinados artículos generan “confusión ya que se puede asociar menú ecológico a saludable en detrimento del resto de alimentos que pueden ser igual de saludables que los frescos, ecológicos, de proximidad y de temporada”.

Por otra parte, el proyecto de decreto establece que las empresas contratistas y/o adjudicatarias de estos servicios deberán disponer de la documentación que acredite el “cumplimiento de las especificaciones técnicas establecidas, los criterios de adjudicación y las condiciones especiales de ejecución, sobre los estándares de calidad alimentaria, medioambiental y social establecidas”. Para “estandarizar estos criterios y condiciones”, el CVCV solicita que éstos se incluyan en las guías para la elaboración de los planes contra desperdicio alimentario que la norma también plantea que tendrán que hacer la conselleria competente.